Por Ingrid Robyn
foto:G.BlaskyStudio
Se podría hablar de realismo sucio, se podría (como en cierto sentido lo he hecho) recordar lo que de más placentero, de más creativo creo yo, derivó de eso que se llamó el neobarroco, se podría por supuesto enfocar el gran pornógrafo (y lo digo como un cumplido) que se revela Alberto Garrandés en esta novela. El que diga que poco importan las escenas sexuales estará mintiendo. Y hasta se podría citar a Bataille, o acudir a los teóricos de lo queer, y “queerizar” hasta las comas de la novela. Vuelvo a insistir en mi punto, sin embargo. Días invisibles es, ante todo, una novela para disfrutarse, una novela con un sentido de humor y un “grafismo” (porno y no porno) que es casi como un paseo de taxi (al garete) por esa Habana imaginaria (pero no tanto) que sólo un escritor de la generación y calibre de Alberto Garrandés podría haber pintado con tantos colores. Y en lo que escribo eso me recrimino, porque no de realismo, ese que se llama realismo, no de “representar a Cuba” se trata. De pronto, trama y escenario en sí mismos no son sino una excusa para hacer reír, para hacer gozar. Y tal vez por eso es que Días invisibles se nos presenta como una novela tan disfrutable. Una novela que parece haber aprendido lo mejor de la tradición literaria cubana, sin necesariamente caer en las mallas de los (a veces aburridos, a veces inevitables) compromisos de otrora, y que cumple a la perfección lo que, entiendo yo, es la función principal de la novela: el verter lento de placer que “es, en un punto, el mismo que el de la angustia.” Mis cumplidos.
Ingrid Robyn, ensayista brasileña. Tomado de: www.elroommate.com
Ficha curricular breve:
Alberto Garrandés (La Habana, 1960) es narrador y ensayista. En estos años ha publicado Sexo de cine (Ediciones ICAIC, 2012, Premio de la Crítica en 2013), Body Art (cuentos, Editorial Letras Cubanas, 2014), El ojo absorto (ensayos, Ediciones ICAIC, 2014), El sueño de Endymion (ensayos, Ediciones Matanzas, 2015), Una vuelta de tuerca (ensayos, Ediciones ICAIC, 2015), y Capricho habanero – Corte del director (novela, Editorial Ácana, 2015). Las editoriales Letras Cubanas y Arte y Literatura dieron a conocer recientemente su novela Demonios (Premio Alejo Carpentier 2016) y Diálogos con los muertos y otros ensayos, respectivamente.